Como se anunció hace un par de días, el mexicano Kelvin Gastelum recibió una sanción de 90 días y una multa del 20% de sus ganancias por parte del Tribunal Superior de Justicia Deportiva de MMA Brasileño (STJDMMA) tras haber dado positivo en un contro antidopaje el 11 de marzo de este año.
Tras llegar a un acuerdo con el Tribunal, Gastelum publicó el domingo en su cuenta de Instagram que nunca volvería a pelear en Brasil porque lo único que querían era dinero. El lunes, Kelvin participó en The MMA Hour y dijo haber dejado de fumar marihuana tres semanas antes de la pelea, como suele hacer para cada pelea, y aún así dio positivo.
Marcelo Sedlmayer, presidente del STJDMMA emitió un comunicado esa misma noche para aclarar que la versión que el peleador les había dado era muy distinta a lo que había dicho en el programa y que además tenía irregularidades considerables.
- Gastelum inicialmente declaró haber consumido un medicamento que contenía THC (tetrahidrocannabinol), es decir, para uso medicinal solamente.
- Hoy (lunes), cambia su versión y dice haber fumado.
- Alega tener una licencia para usar marihuana en California, sin embargo NUNCA mostró dicha licencia a la Comisión Atlética ni al STJDMMA.
- Su licencia es únicamente válida en California, ya que cada estado y país tiene sus propias leyes.
- Además de no presentar la licencia, nunca reveló el nombre del medicamento, ni la dosis (la receta), ni el nombre/información del doctor que se la prescribió, ni el porqué sería necesario para él consumir la sustancia.
Finalmente, hay innumerables argumentos suyos que carecen de fundamentos y están basados en mentiras. Para empeorar las cosas, él dice haber fumado tres semanas antes de la pelea. El rastro encontrado en sus pruebas excede por mucho esa teoría.
Es muy raro que un atleta pida llegar a un acuerdo, esté de acuerdo con todo, lo firme, y después vaya ante los medios a quejarse sobre la multa.
Los atletas profesionales tienen el poder y la obligación de ser un ejemplo. Los aficionados no pueden ser aficionados de malos ejemplos.
Por último, Sedlmayer afirmó que la sanción de 90 días no cambiará a pesar de las alteraciones en las declaraciones de Gastelum.
