Robert Whittaker está listo para defender el cinturón en una revancha ante Yoel Romero. Sin embargo el australiano dijo tener dudas respecto a si se puede decir lo mismo de su oponente. Robert duda sobre la motivación del cubano para pelear por el título.
Las dudas del campeón se deben a comentarios de esta semana de Yoel Romero sobre un posible retiro. De acuerdo al pensamiento de Whittaker, alguien que piensa en el retiro quizás no tenga motivación para pelear.
“Me suena a que ya se rindió. No creo que puedas entrar motivado a una pelea si ya estás pensando en el retiro. Cuando me llegue ese momento las cosas serán diferentes -no digo que yo tenga razón ni que él esté mal. En el momento que sienta haber peleado suficiente, eso es todo. Llamaré a mis entrenadores y a UFC al día siguiente y les diré que se acabó. No puedes entrar a una pelea sabiendo que vas a colgar los guantes después.”
Además, el campeón cuestionó la ética de Yoel por no haber dado el peso en UFC 221. De hecho, Robert dijo que si él hubiera sido Rockhold, no habría aceptado la pelea.
“Yo jamás hubiera aceptado. Si llegas pesando 87 kilos, que es lo que Romero hizo, ¿por qué no llego yo pesando 95? ¿Cuál es la diferencia? Ambos seríamos poco profesionales y el corte de peso influye directamente en la pelea. Creo que no dar el peso es lo peor que puedes hacer, es tan malo como no presentarse. Si no das el peso yo no peleo. Le doy la oportunidad a alguien más que sí pueda hacer su maldito trabajo.”
El australiano está confiado en lograr su primera defensa del cinturón. De hecho, espera que la pelea sea muy parecida a la anterior, con la diferencia de que esta vez su rodilla estará al 100%
“Creo que será exactamente la misma pelea. Solo que esta vez estaré en mejor forma y con la rodilla sana.”
