La tarde de este miércoles 19 de septiembre USADA anunció oficialmente la sanción para Jon Jones. Luego de meses de especulaciones y espera, finalmente se reveló el castigo para el ex campeón de peso semi completo. Tras haber dado positivo en un examen previo a UFC 214, ‘Bones’ podrá volver al octágono a finales de octubre.
Jon llevó su caso a conciliación, argumentando ser inocente de haber hecho trampa. La sanción fue de 15 meses y aplica de manera retroactiva. La prueba en la que dio positivo Jones fue administrada el 28 de julio de 2017. Por lo tanto, su sanción empieza a correr desde ese día y expira el próximo 28 de octubre.
Jones todavía recibirá la sanción de la Comisión Atlética de California, ya que la prueba se realizó en Anaheim. Pero la resolución de USADA podría marcar un precedente en cuanto a la duración del castigo. Este miércoles un árbitro independiente fijó la sanción de 15 meses luego de una audiencia privada el fin de semana.
Jon asegura no haber consumido ningún esteroide durante la fecha del examen. Aunque sí admitió haber consumido drogas ilegales, incluyendo cocaína, antes y después de la prueba.
A pesar de insistir en su inocencia, Jones no ha podido explicar la sustancia en su organismo. Presentó 14 suplementos para ser sometidos a prueba por posible contaminación. Sin embargo ninguno de ellos dio positivo por la sustancia que se le imputa.
Aunque no se descubrió el origen de la sustancia, considerando las circunstancias, USADA solo planteó una suspensión de 18 meses. Por increíble que parezca, identificar el origen de la sustancia no es necesario para poder reducir una sanción. De igual forma, la confesión de Jones respecto al uso de cocaína tampoco influye en la decisión.
Jones queda elegible para volver a la jaula a partir del 28 de octubre. Considerando que UFC 230, a celebrarse el 3 de noviembre en Nueva York todavía no tiene evento estelar, es evidente que UFC intentará que sea Jones el protagonista.