En reciente entrevista, la leyenda brasileña Anderson Silva reveló que quería retirarse en el 2012. El ex campeón de peso medio de UFC, quería irse antes de su primer pelea contra Chris Weidman en UFC 162.
Silva era el peleador número 1 libra por libra en el deporte en ese momento. Y venía de una racha de 17 peleas ganadas con un TKO sobre Stephan Bonnar en UFC 153. Se habló de una súper pelea en contra del campeón de peso welter George St. Pierre. Pero la pelea nunca se materializó por alguna razón. Cuando la pelea en contra de GSP no sucedió, Anderson había planeado retirarse.
Durante la entrevista, Silva admitió que le había dicho a UFC que en el 2012 quería retirarse. De acuerdo con Silva, un poco después, el presidente de UFC, Dana White, y el ex propietario, Lorenzo Fertitta, le compraron un nuevo Bentley Continental GT, con valor de $174,000 dólares, en lo que él cree que fue un soborno para que continuara peleando a pesar de que quería renunciar y pasar tiempo con su familia.
“Quiero parar, quiero tiempo para mí, para quedarme con mi familia. Había estado haciendo esto por años y perdiendo contacto con mis hijos. Yo sólo entreno y entreno. Ya no está funcionando para mí.”
Silva luego acordó pelear en contra del entonces invicto Chris Weidman en UFC 162. Pero, dijo que si ganaba esa pelea, estaba listo para retirarse. Terminó perdiendo y canceló esos planes de retiro.
“Pero un día antes de comenzar mi campamento para pelear contra Weidman, ya estaba demasiado saturado. Nunca hablé de esto, nunca usé este término “si gano.” Le dije a mi esposa: ‘Si gano, me detendré, ya no pelearé.'”
Anderson luego perdió la revancha ante Weidman en UFC 168 y se rompió una pierna en el proceso. Él dice que si hubiera ganado la revancha, se habría retirado esa noche.
“Me habría detenido si hubiera ganado la pelea, ya no pelearía más, pero terminé quebrándome la pierna. Creo que ese fue un mensaje de Dios que me decía: ‘Mira, hombre, no debes parar todavía. ¿Te tomó tanto tiempo llegar aquí y ahora quieres parar?’ No lo sé, creo que esos son mensajes subliminales que permanecen en tu cabeza.”
Desafortunadamente para Anderson, no retirarse en lo más alto le ha causado siete años de mala suerte en el octágono. De 2013 a 2019, Silva se ha ido 1-6, 1 NC dentro del octágono. Pasando de un récord de 33-4 en la cima de su carrera a un récord de 34-10, 1 NC ahora. Lo que ha empañado su legado a la vista de algunos fanáticos.
Si se hubiera retirado en la cima, el derrape perdedor nunca habría sucedido, pero, de nuevo, es fácil mirar hacia atrás y decir ‘qué hubiera pasado si.’ Independientemente de sus recientes desgracias, Silva sigue siendo uno de los mejores la historia y una leyenda de las MMA.
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