La siguiente pelea de Tyron Woodley podría ser una de esas oportunidades de matar o morir.
El ex campeón welter de UFC viene de un par de derrotas consecutivas por primera vez en su carrera. En UFC 235 en marzo del año pasado, Tyron Woodley perdió el título ante Kamaru Usman luego de ser dominado por cinco rounds. Quince meses más tarde, peleó contra Gilbert Burns en la pelea estelar de UFC on ESPN 9 y nuevamente cayó en las tarjetas.
Los desempeños deslucidos dejaron a algunos cuestionando cuánto le queda en el tanque a Woodley, que cumplió 38 años en abril. Actualmente es el número 5 en la división welter y tiene otra pelea de alto perfil el 19 de septiembre, cuando finalmente se enfrente a su rival Colby Covington.
Woodley abordó las preocupaciones sobre su falta de agresividad en sus peleas recientes durante una sesión de preguntas y respuestas de los fanáticos en Instagram, cuando un fanático sugirió: “Por favor suelta las manos.”
“Estoy de acuerdo contigo. Dejaré que mis manos se suelten. Ustedes los fanáticos que me dicen, ‘suelta las manos, suelta las manos,’ tengo que soltarlas. Estoy de acuerdo con ustedes y ustedes tienen eso, tienen mi palabra.”
Durante su tiempo como campeón de peso welter, Tyron no fue conocido como un artista del KO. Sin embargo, noqueó a Robbie Lawler para ganar el título hace cuatro años. También mostró destellos de su poder en un par de peleas con Stephen ‘Wonderboy’ Thompson.
La rivalidad entre Woodley y Covington es profundamente personal. Durante años ha ido creciendo. Es por ello que Tyron bromeó diciendo que podría comenzar a golpear más bajo de lo esperado.
“Voy a dejar ir estas manos. Voy a dejar que se vuelquen a la cabeza, el cuerpo, incluso podría darle un puñetazo en las bolas y tomar la advertencia. Aceptaré la advertencia o incluso la deducción de puntos.”
