El sábado pasado en la cartelera de UFC 267, Elizeu Zaleski y Benoit Saint-Denis se enfrentaron en lo que se convertiría en una de las peleas más comentadas de la noche.
Durante el primer asalto tanto Zaleski como Saint-Denis tuvieron momentos de éxito. Sin embargo Zaleski lastimó gravemente a Saint-Denis con golpes a mitad del segundo round. Zaleski intentó continuar y terminar con el peleador francés pero Saint-Denis se mantuvo firme. El referee Vyacheslav Kiselev se negó a detener la pelea, a pesar de la horrenda cantidad de golpes que Saint-Denis estaba recibiendo.
Tan mala fue la embestida que, durante el round, el comentarista Daniel Cormier comenzó a gritar al árbitro que interviniera. Saint-Denis terminó sobreviviendo hasta el final del round, pero las cosas solo empeoraron a partir de ahí, ya que al comienzo del tercer episodio, Zaleski picó accidentalmente el ojo de Saint-Denis. Después de un breve descanso, Kiselev reinició la pelea sin importar que Saint-Denis comentó que no podía ver. Finalmente, Saint-Denis terminó perdiendo por decisión unánime, y Kiselev fue relevado de sus funciones por el resto de la noche.
Los comentarios sobre el desempeño de Kiselev no se hicieron esperar. Sin embargo, el referee no es el único culpable. El equipo de Saint-Denis también ha sido objeto de críticas por no haber ‘tirado la toalla’.
Durante la pelea, el equipo de comentaristas de UFC; Daniel Cormier, Jon Anik y Paul Felder, cuestionaron al equipo de Saint-Denis por enviarlo de regreso a un tercer asalto. A pesar de las críticas, el entrenador de Saint-Denis, Daniel Woirin, dijo que ni siquiera consideró proteger a Saint-Denis.
“Nunca en mi vida habría tirado la toalla. Es verdad, el referee pudo haberla detenido en algún momento, y pensé que la iba a detener, pero no lo hizo. Benoit recibió muchos golpes pero fue capaz de recuperarse, lo que le permitió sobrevivir. Pero así es la pelea, la pelea es dura, la gente es demasiado sensible. Benoit es un guerrero, ¿perdería en su primera pelea en UFC antes del límite de tiempo? No es posible. También lo discutimos después de la pelea y me dijo que estuvo bien no haber tirado la toalla. Ni siquiera pasó un segundo por mi cabeza, ni siquiera un segundo y puedes ver que regresó a la pelea”.
Sin embargo, Woirin no solo defendió su decisión al no terminar la pelea, sino que, también defendió la decisión de Kiselev. Woirin dijo que aunque otro referee probablemente habría intervenido, no hacerlo era lo que Saint-Denis quería.
“Tuvo una gran pelea. Zaleski es un top 12, el tipo tiene 30 peleas, 14 nocauts. Benoit tuvo una gran pelea, estoy muy feliz. De hecho, cuando estás en la jaula no quieres ser finalizado. Por eso solía gritarle en ocasiones a Benoit, para que intentara mantenerse y no estuviera inactivo. Cuando un peleador permanece inactivo, el referee puede detener la pelea. Sinceramente, creo que si no fuera por él, otro referee la habría detenido. El hecho de que no la detuviera hizo que la pelea fuera aún más interesante, ya que Benoit aceleró el paso. Fue increíble, incluso yo estaba atónito, ¿sabes?”.
