Khabib Nurmagomedov presume ser un hombre que nunca se presta a juegos y sigue sus convicciones. Solía decir lo mismo sobre sus decisiones en el ámbito deportivo. Aseguraba que no le interesaba el dinero ni las peleas sin méritos. Pero bueno, esa es otra historia.
Esta semana Khabib fue multado y suspendido por la Comisión Atlética del Estado de Nevada (NSAC, por sus siglas en inglés). Pero le ofrecieron la posibilidad de reducir tres meses de su suspensión si graba un anuncio de servicio público. El video debería ser grabado y entregado por Khabib antes de que finalice febrero, de esta forma podría volver a la jaula en abril.
Khabib ha declinado la oferta y tampoco planea volver en julio -cuando termina su suspensión. El plan de Nurmagomedov es regresar al octágono en noviembre en el Madison Square Garden. El campeón de peso ligero explicó porqué se rehusó a cooperar con la NSAC.
“La NSAC dijo que participara en una campaña social… en Nevada permiten las drogas, prostitución y apuestas. Dejaré que ellos trabajen en sí mismos y en sus comportamientos. Hubo peleadores que no quisieron pelear por dos años y conservaron su cinturón por año y medio. Yo estoy listo para pelear, ellos son los que me suspendieron.”
La decisión de Khabib de nunca volver a pelear en Las Vegas parece definitiva. Tanto así que asume que UFC intentará presionarlo para que vuelva en julio y lo amenazará con crear un título interino. Nada de eso preocupa al ruso, quien al parecer ya sabe cómo se resolverá todo.
“Creo que crearán un título interino. Podría ser entre Poirier y Ferguson. Quien gane será el campeón interino, y de ahí al final del año pelearemos por el verdadero cinturón.”
Esto es lo que pasa cuando UFC prioriza el dinero sobre los méritos deportivos. Khabib aprendió cómo funciona el sistema, sabe que tiene ventaja en las negociaciones y no le importa quedar bien con UFC.