Liam McGeary esperó más de dos años por la oportunidad de una revancha ante Phil Davis. El pasado 28 de abril se le concedió el deseo, pero las cosas no salieron como él hubiera deseado.
Liam fue derrotado por Phil en Bellator 220, pero además esta vez la pelea no se fue a la distancia. En esta ocasión McGeary se rindió mientras Davis lo golpeaba en el piso. Después del combate quedó más que claro el porqué Liam no había podido continuar. El ex campeón de peso semi completo sufrió una dolorosa fractura en la mandíbula.
El sábado al final del combate era obvio que McGeary había sufrido una lesión. El domingo el propio peleador confirmaba que se trataba de una fractura y presumía la radiografía. Además, perdió también un diente.
“Ugh… la mandíbula tronó en el segundo round y el diente se fue en el tercero. En cuanto ese brazo llegó y me tocó la mandíbula, ¡fue suficiente para mí, amigos! ¡Eso dolió como un hijo de p**a y ustedes saben que yo puedo tolerar bastante mierd4 también! Carajo, hombre, estaba demasiado preocupado por los derribos en el primero, estuve dubitativo. Carajo, me derribaste en el tercero y me levanté de inmediato. He mejorado mi juego, hombre, los luchadores ya no me molestan más… solo el maldito dentista.
Felicidades @philmrw, esa mierd4 estuvo buena, amigo, disfruté pelear contigo, hombre. Te veré en el bar para una cerveza cuando acabe aquí.”
A pesar del resultado y la lesión, queda claro que Liam McGeary ha logrado mantenerse de buen humor. Aunque no tiene idea de cuánto tiempo tardará en poder volver a la jaula, el veterano parece convencido en enmendar el camino luego de sufrir la tercera derrota en un sus últimos cuatro combates.
Por su parte Phil Davis aprovechó la victoria para pedir una tercera pelea ante el campeón Ryan Bader.
